jueves, 15 de noviembre de 2012

EL EGOLATRA

Convencido de ser el elegido, camina por la calle de los fracasados esperando recibir halagos.

Le hicieron creer que era un iluminado. Va por la vida predicando oscuras ideologías, solo mensajes vagos.

Su ombligo es el centro del mundo y, sin quererlo, hacia allá todos vamos.

Es bello, culto y refinado. Dicta cátedra de cómo no llegar a ser afeminado.

No permite que le digan “No”, ni mucho menos “Estas confundido”, él siempre tiene la razón, de su boca nunca se oirá la palabra “Perdón”.

Es primo hermano de Narciso, y sospecho que va a correr el mismo destino.

Por eso te deseo suerte y un consejo solo te digo… Cuidado con los reflejos, por porfiado, en un ricón vas a terminar desconsolado.

A  los ególatras en general, ninguno en particular… Por mal que les pese.

Flavia L.